El organismo religioso reprochó que en el proceso de enseñanza- aprendizaje que se desarrolla en las escuelas existen intereses personales y gremiales, sin mencionar nombres
“Celebramos los recientes esfuerzos conjuntos de redacción entre el Gobierno y la sociedad, con su pluralidad de actores, para la reforma al Artículo Tercero Constitucional, así como sus resultados“, expresó la CEM en un comunicado.
La comodidad y la avaricia, es decir la búsqueda del propio bienestar como un fin en sí mismo y o intereses personales o gremiales, son valores antiéticos al deseo y acción de educar.
“Compartimos plenamente el tema de la innovación, la garantía de acceder a los progresos de la ciencia y la tecnología, así como asegurar una educación superior para todos aquellos que lo deseen, con instituciones que gocen de autonomía universitaria”, recalcaron.
En el documento, la Iglesia católica mexicana mostró su respeto al fortalecimiento de la educación laica, que garantiza la libertad religiosa para todos los ciudadanos.
Especialmente para quienes queremos participar en el desarrollo de la Nación mexicana, ofreciendo espacios de educación privada, formal y no formal, según nuestras creencias y valores de vida.
En el escrito se llamó a los padres de familia a asumir su responsabilidad de primeros educadores de sus hijos.
“Los animamos a que se involucren activamente en los organismos de participación escolar, así como a reforzar lo enseñado en casa y en la escuela, con espacios de educación no formal: escultismo, promoción del arte, el deporte, la cultura y la religión, en los que niños y jóvenes puedan ir integrando el arte de la vida”, convocaron.
El documento fue firmado por Enrique Díaz Díaz, Obispo de Irapuato y responsable de la Dimensión de Pastoral Educativa y de Cultura de la CEM.
Fuente: Debate